El año termina. Como siempre. Al igual que termina el día tras salir y ponerse el Sol y sale su opuesta amiga, la Luna. Es algo cíclico, es algo que tiene que ser así. Pero no termina, sin embargo, lo que sí debería morir para siempre, lo que todos juntos estamos obligados a arrancar de raíz: la violencia de género.
Tanto mujeres (en una inmensa mayoría) como hombres siguen muriendo a manos de sus parejas o ex parejas por diversas razones en las que predominan los celos, el hecho de que el maltratador no soporta perder el control de la víctima y la identificación a su pareja como un objeto de su posesión por parte del delincuente, según una información de El Confidencial.
La misma publicación asegura que no existe un patrón sociológico de gente que realiza o puede realizar unos malos tratos en el futuro: con bajo o alto nivel económico, ancianos o jóvenes o de ámbito rural o urbano. El Mundo ratifica, además, que una de cada cuatro víctimas no denuncia a su agresor por miedo, vergüenza, culpa por qué le pueda pasar a su pareja e incluso por no identificar un caso propio de malos tratos.
La siguiente infografía expone las víctimas mortales por violencia doméstica en el año que dejamos atrás.
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Más víctimas femeninas
Es manifiesto que el grupo que más sufre esta transgresión es el femenino. Una descomunal diferencia que, según un artículo firmado por Andrés Montero en la web nodo50.org, se debe a la férrea convicción que tiene el maltratador de que es necesario matar. El hombre tiene la certeza de su legitimación para utilizar la violencia con el claro objetivo de mandar sobre la mujer, de manejar su comportamiento en un orden predeterminado que él mismo exige. El Observatorio Estatal de Violencia de Género dice que las muertes de mujeres por partes de sus parejas ascienden progresivamente desde principios de esta década, con tan solo una leve reducción en 2005.
En verano es cuando más asesinatos por violencia de género acontecen
Ley contra el maltrato
En 2004 se elaboró la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, la cual entró en vigor el 22 de diciembre de un año después. Dicha legislación manifiesta que se trata de una violencia que se dirige sobre las mujeres por el hecho mismo de serlo, por ser consideradas por sus agresores carentes de los derechos mínimos de libertad, respeto y capacidad de decisión. Los objetivos de la Ley Orgánica 1/2004 contra los malos tratos son proteger a la víctima, apartar al agresor y proteger a la parte más débil aplicando el Derecho Penal. Según el cual, también, se considera como delito las amenazas, lesiones y coacciones a la víctima, se facilita un teléfono de ayuda contra el maltrato (016) y se fundamentan organismos especializados en el tema.
Para elaborar esta infografía, cuv3 ha recurrido a las siguientes fuentes: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ibasque mediante su web (ibasque.com), hombresmaltratados.es, feminicidio.net y chefyc.wordpress.com.
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