Fiel compañero y amigo de Joaquín Sabina. Músico y, aunque menos, también letrista. El maestro Pancho Varona recibe a cuv3 en el Gourmet Experience de El Corte Inglés, donde expone algunos recuerdos vividos junto al cantautor y poeta jiennense.
Pregunta: ¿Cómo conoció a Sabina?
Respuesta: Le conocí porque actuaba dos veces por semana en La Mandrágora (actualmente denominada Lamiak), un local de la Cava Baja, con Javier Krahe y me hice fan suyo. Iba a verle siempre que actuaba. Nos veíamos todos los días, ya nos conocíamos de vista. Un día me pidió un cigarro, porque fumábamos la misma marca, y a raíz de ahí empezamos a charlar.
P: ¿Qué amistades ha hecho a partir del primer concierto hasta hoy?
R: Todas. Escritores, músicos, periodistas, actores. De todo. Estar con Joaquín ha sido un lujo porque me ha presentado a García Márquez, que era Dios para nosotros, o a Saramago… Sobre todo, Joaquín admira más a los escritores que a los músicos. Le impresiona más García Márquez que un Mick Jagger. A mí más que Mick Jagger a lo mejor sí, pero más que Keith Richards no estoy seguro.
P: ¿Quién de todas le ha sorprendido más?
R: Todos son gente muy cercana. Tienen un lado humano que a lo mejor la gente piensa que no podían tener por el simple hecho de ser una estrella, pero no es así. Ana Belén, por ejemplo, es un encanto de mujer.
Trabajos
P: ¿Qué es todo lo que ha hecho junto a Sabina?
R: En 1981 le conocí, un año después ya empecé a trabajar con él. He hecho cien canciones, he producido trece discos, he hecho más de 2.000 conciertos, más o menos, más de 1.000 seguro. Llevamos toda una vida juntos. Hemos hecho de todo: viajes, giras, discos, canciones… De todo.
P: ¿Y solo?
R: No tengo vocación de artista ni de solista, entonces solo me gusta menos viajar. También lo hago de vez en cuando con conciertos acústicos, por ejemplo, ahora en Cataluña doy una serie de cuatro conciertos yo solo. Pero me gusta menos. Me gusta más ir con Antonio García de Diego, con Mara y Antonio o con Joaquín, por supuesto, si puede ser.
“Sabina admira más a los escritores que a los músicos”
P: ¿Cómo se pone a componer? ¿En qué piensa?
R: Suele ser con una letra ya hecha, fijándome en ella. Si tengo que hacer algo sin letra también lo hago, pero creo que la inspiración es más trabajo que cualquier otra cosa. Si no estoy inspirado, me puedo tirar cinco horas con una guitarra y es más fácil que salga algo a que si me tiro diez minutos inspirado. El trabajo y la insistencia son la inspiración. Es cierto que dicen que cuando tienes un desamor salen canciones más bonitas. Puede ser.
P: ¿Qué canción ha sido la más especial tanto en su carrera como en su vida compuesta por usted? ¿Y no compuesta por sí mismo?
R: Te puedo poner dos de las mías: “Y sin embargo”, de Sabina, e “Y no me importa nada”, de Luz Casal. Esas han sido las dos más importantes de mi carrera. De la historia, los Beatles son lo que más me gusta. Tendría que ser una de Lennon, le amo con toda mi alma. Te diría “Come Together”.
Recuerdos y confesiones
P: ¿Cuál es el mejor concierto que recuerda?
R: Hay uno que no fue el mejor pero sí el más emotivo. Dimos un concierto en La Bombonera de Buenos Aires en diciembre de 2006. Había 45.000 personas y cayó una tormenta que empezaron a volar los instrumentos por el estadio. Se inundó el campo, se fue la luz y hasta hubo peligro de muerte porque las pantallas de vídeo podían caer en la multitud. Corrimos por el campo y dejamos el concierto, llevábamos hora y media de concierto, nos quedaba otra media hora. Estábamos cantando “Ruido” y ese concierto fue memorable.
P: ¿Y el peor?
R: Los que puedo recordar son relacionados con alguna enfermedad de Joaquín. Por ejemplo, en Tijuana, hace dos o tres años, dimos un concierto en el que Sabina de repente, en la sexta canción, se dio la vuelta, empezó a tocarse el corazón y pensábamos que le iba a dar un infarto. Tuvo que abandonar el escenario, se le llevaron a un hospital de urgencia y luego resultó ser un problema muscular. También hubo otro, en Gijón, en el que Joaquín estaba afónico y no pudo cantar. Esos los recuerdo con tristeza.
P: ¿Queda alguna canción de Sabina hecha por salir?
R: Tenemos poco en el cajón. Hay alguna cosa, dos o tres que meterá Joaquín en un nuevo disco que va a grabar. Ahí saldrán. Si tenemos algo hecho que nos interese lo metemos. Pero la mayoría es: vamos a sacar un disco, vamos a componer.
“El mejor más emotivo que recuerdo fue en 2006, en La Bombonera”
P: Atlético confeso, ¿y de Boca? ¿Cómo ve la actualidad colchonera?
R: Sí, por supuesto. El día que Joaquín y yo llegamos a Buenos Aires dijimos que ahí teníamos que ser de Boca. A mi Atleti lo veo bien. Firmo una época feliz con Simeone, ganar de vez en cuando una Liga y llegar a alguna final más de Champions.
P: ¿En qué lugar ha sido más emocionante tocar?
R: Te diría varios: La Bombonera, el teatro Gran Rex, Las Ventas, el Auditorio Nacional de México D.F. o el Palau Sant Jordi.
P: ¿Qué nos cuenta de su faceta como escritor?
R: Estoy escribiendo un libro sobre mis 30 años con Sabina, pero tardará en salir. A los escritores les respeto mucho como para decir que soy escritor.
P: ¿Qué planes tiene próximamente?
R: Ahora estoy de gira con la Noche Sabinera. Con Joaquín, el plan que hay es hacer un nuevo disco.
P: Para terminar, ¿ve su retirada de los escenarios lejos?
R: Quiero dar guerra mucho mucho tiempo más. Espero que me quede mucha guerra. Cada vez estoy más a gusto en los escenarios.
La entrada Pancho Varona: “Quiero dar mucha más guerra” aparece primero en cuv3. El digital de la FCOM de Villanueva C.U..